Ampliación de la facultad sancionadora del Organismo Supervisor de las Contrataciones del Estado (OSCE)
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Fecha
2015Autor(es)
Aguilar Zavaleta, Cinthya Fiorela
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Mostrar el registro completo del ítemResumen
Hoy en día; las contrataciones y adquisiciones del Estado están consideradas
como una de las áreas críticas dentro de la gestión pública, que se ve afectada por
los mayores casos de corrupción, situación que es muchas veces provocada por
los funcionarios y servidores intervinientes en el proceso de selección y
contratación que amparados en los márgenes de discrecionalidad que en sus
actuaciones les permite la normativa en materia de contratación, actúan relegando
los intereses colectivos generales y públicos en sus actos de gestión y actos
administrativos, a fin de procurar intereses particulares o de terceros.
Si bien, nuestra legislación en materia de contratación estatal prevé que los
funcionarios y servidores, así como los miembros del Comité Especial que
participan en los procesos de selección y contratación son responsables de su
cumplimiento ante actos u omisiones, cuyo adecuado desempeño es evaluado por
la más alta autoridad de la Entidad a la que pertenecen, la que podrá disponer de
exámenes y auditorias especializadas facultándolos para que en caso de
incumplimiento, según su gravedad, impongan desde una amonestación escrita,
suspensión sin goce de remuneración de treinta a noventa días, cese temporal sin
goce de remuneración hasta por doce meses y la destitución o despido; cierto
también es que en tales contrataciones y adquisiciones existe la innegable
peculiaridad de involucrar en la probable determinación de responsabilidad tanto a
los funcionarios y servidores públicos con el Titular de la Entidad, que es quién
debe evaluar el desempeño de los referidos funcionarios y servidores. “Today; Contracting and acquisitions of the State are considered to be one of the
critical areas within the public management, which is affected by the major
corruption cases, situation that is often caused by officials and servers involved in
the process of selection and recruitment that covered in the margin of discretion
enabling in performances with the rules on procurement they are relegating the
collective interests of General and public in their acts of management and
administrative acts, in order to seek private or third party interests. While our public
procurement legislation provides that officials and servers, as well as the members
of the Special Committee involved in selection and hiring processes are
responsible for their enforcement by their acts or omissions, whose proper
performance is evaluated by the highest authority of the institution to which they
belong, which tests are available and audits specialized empowering them so that
in the event of non-compliance , depending on its severity, imposing from a written
reprimand, suspension without pay of thirty to ninety days, temporary cessation
without remuneration up to twelve months and the dismissal or dismissal; true is
also that in such contracts and acquisitions there is the undeniable peculiarity
engage in determining liability likely much to officials and public servants with the
holder of the entity, which is who should evaluate the performance of the
concerned officials and servants.“