Consumo de bebidas energéticas asociado a mala calidad del sueño en estudiantes de medicina humana en una universidad privada
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Fecha
2019Autor(es)
Muñoz Alvarado, Carlos Alberto
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Objetivos: Establecer si existe asociación entre el consumo de bebida energéticas y mala
calidad del sueño en estudiantes de medicina.
Material y Métodos: Realizamos un estudio observacional, analítico, de corte transversal,
en estudiantes de medicina humana de la Universidad Privada Antenor Orrego, durante el
semestre 2017 - II. Aceptaron participar 488, y luego de aplicar criterios de selección, se
eligió una muestra aleatoria de 310 estudiantes. Se les realizó un cuestionario, y así fueron
clasificados según la presencia de mala calidad del sueño; posteriormente se realizó un
análisis bivariado con la variable independiente e intervinientes (somnolencia diurna, sexo,
género)
Resultados: Se analizaron 310 estudiantes, encontrándose una prevalencia de mala calidad
del sueño de 93%. Además la prevalencia del consumo de bebidas energéticas y somnolencia
diurna fueron 17% y 40% respectivamente. La edad promedio en el grupo con mala calidad
del sueño fue 21,12 ± 3,08, mientras que en el grupo sin mala calidad del sueño 20,48 ± 2,20.
El sexo predominante fue el femenino con 50.7%. Luego de realizar el análisis bivariado, se
encontró que el consumo de bebidas energéticas no estuvo asociado a la mala calidad del
sueño (p=0,34); así como ninguna de las otras variables en estudio.
Conclusiones: El consumo de bebidas energéticas, la edad, género y somnolencia diurna,
no son factores asociados a mala calidad del sueño. Objective: To determine if energy drinks consumption is associated with poor sleep quality
in medical students.
Material and methods: We conducted an observational, analytic, cross sectional study in
medical students of Antenor Orrego Private University. There were 488 who accepted to
participate, and after applying selection criteria, a sample of 310 students were randomly
chosen. Those were asked a questionnaire, and then classified according to the presence of
poor sleep quality. Subsequently, a bivariate analysis was performed with independent and
intervening variables (daytime sleepiness, sex, gender)
Results: 310 students were analyzed, finding a prevalence of poor sleep quality of 93%. In
addition, the prevalence of energy drinks consumption and daytime sleepiness were 17%
and 40% respectively. Average age at the group with poor sleep quality was 21.12 ± 3.08,
while in the group without poor sleep quality was 20.48 ± 2.20. The predominant sex was
female with 50.7%. After performing bivariate analysis, it was found that energy drinks
consumption was no associated with poor sleep quality (p value=0.34); as neither did any of
the other variables.
Conclusions: Energy drinks consumption, age, gender and daytime sleepiness are not
associated factors to poor sleep quality
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- Medicina Humana [2969]